¿Tienes pequeñas venitas en las piernas que se ramifican, presentan un color más intenso y oscuro de lo habitual y te causan dolores y molestias? No se alarme, son "varices". Un problema bastante normal, sobre todo en las mujeres, que no suele entrañar gravedad. Existen diferentes causas de la aparición de varices:
Las varices son dilataciones de algunas de las venas que presentan dificultades para establecer el retorno de la sangre al corazón. Esta insuficiencia venosa hace que la sangre se acumule en ciertos lugares, provocando que la vena se dilate y así se haga visible.
En general se distinguen dos tipos de varices, las llamadas varices estéticas, "arañas vasculares" y las varices médicas que presentan "alteraciones fisiomédicas" y son varices más profundas que pueden causar más complicaciones. Son venas cuyas válvulas presentan fallos, no tienen la calidad adecuada y esto provoca que, poco a poco, se vayan desarrollando los problemas de mal retorno de la sangre.
Entre las causas que provocan la aparición de las varices, destacan sobre todo las hereditarias. Si se tiene esta predisposición y además le añadimos problemas relacionados con las hormonas, de aumento de peso y hábitos poco saludables, es normal que las varices hagan su aparición.
Otra de las causas de aparición de varices, principalmente en la zona de las piernas, es el embarazo. En esta etapa una mujer puede desarrollar varices aunque no tenga antecedentes hereditarios. Durante el embarazo la mujer experimenta un considerable aumento de peso, incrementando la presión en la zona pélvica y las hormonas también experimentan importantes cambios. Todo esto contribuye a que aumenten las posibilidades de que surjan varices.
Las rutinas también pueden ser factores que favorezcan la aparición de varices. Permanecer muchas horas de pie o, por el contrario, sentado, aumenta el riesgo de varices. Esto puede afectar tanto a mujeres como a hombres que por su vida profesional tengan que pasar mucho tiempo en la misma postura.